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Montaje de una mano tapando el sol y un mapa de España mostrando las alertas por calor

La AEMET pone en alerta a 11 regiones el jueves, pero marca la fecha del gran cambio

Se llegará a los 40 grados en varios puntos del país

La cuarta ola de calor del verano ha obligado a activar el aviso naranja hasta en once comunidades españolas para este jueves. La Agencia Estatal de Meteorología avisa de temperaturas de hasta 40 grados en varios puntos de la Península. Pero esta situación dará un vuelco radical en cuestión de horas.

Se esperan máximas y mínimas muy elevadas en unos cuantos puntos del país. Eso sí, una vez que finalice este episodio se producirá una brutal caída de los termómetros, que irán acompañados de tormentas en algunos casos.

Montaje de una mujer delante de un ventilador con mucha calor junto a la imagen de un termómetro con altas temperaturas
Tanto las máximas como las mínimas serán muy elevadas | Getty Images

De momento habrá que hacer frente a la masa de aire cálido que se asienta sobre la Península. Los mayores valores térmicos se localizarán en el nordeste y en los valles de los grandes ríos. Durante la jornada del miércoles el calor seguirá siendo intenso, manteniéndose la tendencia del martes.

A destacar el importante incremento que se producirá en el Cantábrico, donde habrá viento sur, publica el portal eltiempo.es. No se descarta que en el interior de Cantabria y del País Vasco se rebasen los 40ºC. De hecho se activará el primer aviso rojo por máximas de 41 o 42 grados en Vizcaya y Guipúzcoa.

Tampoco nos libraremos de los altos valores térmicos durante la noche. En algunos casos se aproximarán hasta los 25ºC, dejando una gran sensación de bochorno. Es el caso, por ejemplo, de la zona centro, la mitad sur peninsular y el valle del Ebro.

Qué tiempo habrá el jueves

El jueves será el último día de la ola de calor. Empezaremos a notar un descenso de las temperaturas en la vertiente atlántica, que será más apreciable en Galicia. Una masa de aire más fría entrará por el noroeste.

No obstante, eso no impedirá que nos tengamos que enfrentar a una jornada especialmente calurosa en gran parte del país. La AEMET ha activado el aviso naranja en 11 comunidades. Se tratan de Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Comunidad de Madrid, Navarra, País Vasco y La Rioja.

Por su parte, Asturias, Galicia, Región de Murcia, Islas Baleares y Comunidad Valenciana estarán en alerta amarilla. Durante el jueves se superarán los 36 o 38ºC en gran parte del interior peninsular y de Mallorca. A los 40ºC se llegará en los valles del Guadalquivir, Guadiana, Tajo, Ebro y de forma local en el Duero.

Esta será la última jornada con unos valores tan elevados. Se espera que a partir del viernes y el sábado el descenso de los termómetros también se extiendan por más puntos del norte. En cualquier caso, todavía se alcanzarán los 38 grados en el interior sur peninsular y en el valle del Ebro.

A partir del viernes cambia la situación

Indican que a partir del viernes aumenta de manera considerable la incertidumbre. En estos instantes, los modelos reflejan un desplome de las temperaturas, que sería más pronunciado sobre todo el domingo.

Durante esta jornada también se prevé un incremento de la inestabilidad. No se descarta la aparición de precipitaciones y tormentas en áreas del norte y centro peninsular. Con las horas incluso podrían llegar a extenderse hasta puntos del este.

Un coche atravesando un charco de agua en medio de una tormenta
En algunas zonas del país pueden caer tormentas | Europa Press

Es cierto que con la entrada del fin de semana empezará a notarse esa caída térmica. Pero no será hasta el domingo cuando se produzca esa disminución de los valores en la mayor parte del país. Los modelos pronostican que no se llegará a los 40ºC en ningún punto.

Sin lugar a dudas supondrá un alivio térmico para muchos territorios. Los termómetros se situarán por debajo de lo habitual para estas fechas y permitirá acabar la semana sin tanto calor. Además, la aparición de lluvias y tormentas resultará esencial para refrescar el ambiente, aunque tampoco dejarán grandes acumulados.